“Donde la resistencia se quiebra, la determinación florece en un nuevo sendero.”

A menudo, pensamos que la resistencia es un muro infranqueable. Sin embargo, cuando esa resistencia cede, no marca un final, sino el inicio de un camino alternativo. La determinación, en lugar de lamentar el obstáculo caído, busca la grieta, el espacio por donde infiltrarse para continuar su avance.

Piensa en el agua que busca su curso. Si encuentra una roca, no se detiene para siempre; rodea, se filtra, busca el camino. De manera similar, nuestra determinación, esa voluntad férrea, al enfrentarse a la adversidad, no se desmorona, sino que se adapta. La persistencia se redefine, encontrando nuevas vías para alcanzar su meta, demostrando que el fracaso es solo una sugerencia, no una sentencia.