“Con la firmeza de un roble y la persistencia del río, labra tu destino, pues la constancia rompe las rocas.”

Esta frase evoca la idea de que, al igual que un roble resiste las tormentas y un río erosiona las rocas con su flujo constante, nosotros también podemos superar los obstáculos a través de la perseverancia.

La firmeza simboliza la convicción en nuestros objetivos, mientras que la persistencia representa la acción continua y decidida. No se trata de ser inflexible, sino de mantener la tenacidad ante la adversidad.

Imagina la fuerza inquebrantable de un roble centenario, o la resistencia de un río que fluye sin cesar. Con determinación, incluso los desafíos más imponentes pueden ser superados. Esa es la esencia de labrar tu propio destino.