
“El eco de tu tenacidad es la melodía del éxito.”
La vida, a menudo, se presenta como una sinfonía compleja, donde las notas discordantes de los obstáculos intentan opacar la armonía de nuestros sueños. Sin embargo, la tenacidad es esa melodía interna que, sin importar cuántos falsetes o silencios inesperados aparezcan, se mantiene firme, resonando con una fuerza inquebrantable.
Imagina a un escultor ante un bloque de mármol inerte. No es la primera cincelada la que revela la forma, sino la constancia con la que cada golpe, cada ajuste minucioso, va despojando lo superfluo, hasta que la obra maestra emerge. Tu perseverancia es esa dedicación, ese compromiso continuo que transforma lo ordinario en extraordinario.