
“No busques la cumbre, cultiva el ascenso.”
La meta final puede parecer lejana, casi inalcanzable. Pero la verdadera motivación reside en la experiencia del viaje, en la disciplina del ascenso. Cada paso, cada esfuerzo, cada respiración en la montaña, es donde se encuentra el verdadero estímulo. Disfruta la ascensión, pues en ella se forja la fortaleza.