“Despierta tu voluntad como un río que rompe sus diques; deja que el torrente de tu acción arrastre cualquier duda persistente.”

La voluntad es una fuerza poderosa, comparable a un río caudaloso. Cuando las dudas intentan contener su curso, es el momento de desatar esa energía latente. Permite que tu impulso primordial rompa las barreras, que la fuerza de tu acción se convierta en un torrente imparable que disuelva cualquier vacilación.

Este ímpetu transformador te libera. Visualiza un río majestuoso liberándose de represas artificiales, su agua fluyendo con libertad y vitalidad. Así debe ser tu determinación: libre, potente y en constante movimiento, llevándose consigo cualquier residuo de temor o inseguridad, dejando tras de sí un camino de logros.