“Sé el arquitecto de tus mañanas, no el prisionero de tus ayer.”
El pasado es un libro que ya hemos escrito; el futuro es un manuscrito en blanco esperando nuestras letras.
No te ancles a las páginas pasadas, con sus aciertos y sus errores. Toma el bolígrafo de tu presente y comienza a escribir un capítulo vibrante y lleno de arquitectura, donde cada decisión sea un ladrillo puesto con conciencia para construir la vida que anhelas.