
“Siembra el optimismo; cosecharás días luminosos.”
La actitud es una semilla. Lo que eliges sembrar en tu mente cada mañana determinará el jardín de tu jornada. Si plantas pensamientos de esperanza y energía positiva, el terreno se abonará para cosechar momentos de alegría y éxito. El optimismo no es ceguera, es la elección consciente de ver el sol incluso entre las nubes.
Imagina que tu mente es un invernadero. Las semillas de tus pensamientos germinan allí. Si siembras dudas, crecerán zarzas. Pero si siembras fe en tus capacidades y en el potencial del día, florecerán margaritas de oportunidades. Un poco de estímulo mental puede cambiarlo todo.