
“Haz de tu propósito la brújula que te guíe, incluso cuando las estrellas parezcan ocultas.”
En los momentos de incertidumbre, tener un sentido de dirección es crucial. Esta frase nos recuerda la importancia de un objetivo claro.
Tu "propósito" es la "brújula" interna que te mantiene en rumbo. Cuando las "estrellas" (las señales externas o las certezas) parecen "ocultas", es tu propia convicción y tu meta lo que te permite seguir navegando. Este impulso, esta claridad interna, es lo que nos mantiene enfocados y con la motivación para avanzar.