“El afecto es el nido donde las emociones encuentran refugio y crecimiento seguro.”

El afecto es el entorno seguro que permite a las emociones florecer sin temor a ser juzgadas o dañadas.

Imagina a un pájaro construyendo su nido con esmero, creando un espacio cálido y protegido para sus crías. El afecto actúa como ese nido para los sentimientos, tanto propios como ajenos, ofreciendo un lugar para madurar y desarrollarse.

Este cobijo emocional es esencial para el bienestar, permitiendo una expresión auténtica y un crecimiento personal continuo dentro de la relación.