“El amor es el faro que guía en la noche de la duda, proyectando la luz de la certeza hacia el puerto de la unión.”

En los momentos de incertidumbre, el amor actúa como un punto de referencia seguro y constante.

Piensa en un barco perdido en medio de una tormenta nocturna. La visibilidad es nula, y el miedo amenaza con apoderarse de la tripulación. De repente, un faro emerge en el horizonte, su luz potente y persistente. El amor es ese faro: una guía infalible en la oscuridad de las dudas o los conflictos. Su luz proyecta la certeza de un destino compartido, de un lugar seguro al que anhelar llegar, reforzando el apego y la devoción en la travesía de la vida.