“La persistencia es el alba que irrumpe tras la noche más oscura de la duda.”

En los momentos de mayor desánimo, cuando la incertidumbre se cierne como una densa niebla, la persistencia actúa como el primer rayo de sol. Es la luz que disipa las sombras y nos recuerda que incluso después de la noche más larga, el amanecer siempre llega.

El río, en su viaje hacia el mar, se encuentra con innumerables obstáculos: rocas, desniveles, sequías temporales. Sin embargo, su flujo constante y su capacidad para encontrar caminos alternativos demuestran una tenacidad inherente. La persistencia es esa fuerza fluida que supera cualquier impedimento para alcanzar su destino.