“La <em>resistencia</em> es el muelle que, tras ser comprimido por la adversidad, se expande con renovada fuerza hacia la meta.”

La adversidad, a menudo, actúa como una fuerza que comprime nuestras aspiraciones y nos empuja hacia abajo. Sin embargo, la resistencia es como un muelle interno; cuanto más se comprime, más potencial de expansión acumula, liberando una fuerza renovada hacia nuestro objetivo.

Imagina un atleta que realiza un ejercicio de pliometría; debe flexionar sus rodillas con firmeza para absorber el impacto, y luego impulsarse con toda su potencia. La determinación en ese movimiento de impulso es clave. La constancia en el entrenamiento fortalece ese "muelle" interno.

Esta capacidad de absorber el golpe y transformarlo en impulso, esta tenacidad para no quedar aplastado por las dificultades, es la esencia de la resistencia. La persistencia en este ciclo de compresión y expansión es lo que nos impulsa hacia adelante con una energía revitalizada.