“El combustible de tu día no es la ausencia de problemas, sino la presencia de tu propósito.”

Este impulso te invita a redefinir de dónde proviene tu energía. La verdadera fuerza no está en un entorno libre de adversidades, sino en la **conexión profunda con tu razón de ser**.

Imagina que tu propósito es una **poderosa central eléctrica**. Las dificultades del día son tormentas pasajeras que pueden intentar apagarla, pero si el generador de tu propósito está firmemente anclado y bien mantenido, su energía te sostendrá y te permitirá superar cualquier obstáculo.

Busca y reafirma tu propósito cada mañana; él será el suministro inagotable que te impulse a través de cualquier circunstancia.