“Descubre la chispa en lo cotidiano; la <em>energía</em> reside en la perspectiva.”

La grandeza no siempre se esconde en eventos extraordinarios. A menudo, la verdadera energía se encuentra oculta en los rincones del día a día, esperando ser descubierta a través de una nueva perspectiva.

Imagina un alquimista que transforma el plomo en oro. Nosotros podemos hacer lo mismo con nuestras rutinas: encontrar la inspiración en la preparación del café, en la primera luz del sol, en la sonrisa de un extraño.

Este estímulo diario es un acto de re-enfoque. Al cambiar nuestra mirada, desenterramos la potencia inherente a cada instante, convirtiendo lo ordinario en extraordinario.