“Sé la chispa que enciende tu propio día, no esperes a que la luz provenga de fuera.”

La energía más poderosa para comenzar el día emana desde tu interior. El impulso de la acción no debe depender de circunstancias externas o de la aprobación ajena.

Piensa en ti como un artesano del ánimo. Cada mañana, toma las herramientas de tu voluntad y tu perspectiva, y crea tu propia luz. Puede ser un pensamiento positivo, una tarea apasionante o un simple acto de amabilidad contigo mismo. Tu entusiasmo es auto-generado.

Al ser la chispa inicial, garantizas que tu día arda con el fuego de la inspiración y el propósito.