“El combustible del progreso no es la ausencia de miedo, sino la chispa de la audacia.”

Nadie nace invencible. El verdadero motor para avanzar reside en la capacidad de actuar a pesar de las sombras de la duda. La audacia no es la imprudencia, sino la determinación de dar un paso adelante, incluso cuando el corazón late con fuerza.

Piensa en los exploradores que cartografiaron lo desconocido. No negaron el temor a lo que yacía más allá del horizonte, pero permitieron que la curiosidad y la valentía los impulsaran. Esa chispa de audacia es lo que debes encender hoy.

Deja que ese anhelo de descubrimiento te dé el impulso necesario. Cada desafío superado es un faro que ilumina tu camino, demostrando que la acción vence a la aprensión.