“La disciplina es el arte de honrar tus compromisos contigo mismo.”

Cumplir las promesas que nos hacemos a nosotros mismos es un acto de profundo respeto y disciplina. Este pensamiento redefine su significado.

No se trata de rigidez, sino de la suave pero firme guía que nos dirigimos para alcanzar nuestro potencial. Es el estímulo que nos saca de la cama incluso cuando la pereza llama.

Honrar tus compromisos es construir una relación de confianza contigo mismo, un cimiento sólido para toda tu motivación.