
“Crea tu propia marea de determinación.”
No esperes a que las circunstancias externas generen el cambio. Tú tienes el poder de iniciar un movimiento interior, una ola de determinación que te impulse a través de tus objetivos.
Piensa en la fuerza que genera el océano al subir la marea. Es un movimiento constante, implacable. Tú puedes replicar esa fuerza interna. Enfoca tu impulso en acciones consistentes, y verás cómo tu propia marea te lleva a donde deseas ir.