“Siente el pulso de la acción en tus venas; el movimiento es el lenguaje universal del progreso.”

Esta frase nos recuerda que la motivación se manifiesta en el movimiento, en la acción tangible.

Imagina que tu cuerpo es un motor y la acción es la chispa que lo enciende. Cuando estás inactivo, el motor está apagado. Pero cuando decides moverte, cuando te pones en marcha, sientes la energía fluyendo, el "pulso de la acción". Este movimiento, ya sea físico o mental, es el lenguaje que el universo entiende como progreso. Es un aliento para empezar, para dar ese primer paso que activa toda una cadena de resultados.