“Despierta con la chispa del amanecer, no con la sombra del ayer.”
Esta frase nos invita a iniciar cada jornada con un espíritu renovado, desprendiéndonos de las cargas y los desengaños que el día anterior pudo haber traído.
Es como si el sol, al asomarse, nos otorgara un lienzo en blanco, un impulso fresco para pintar nuestras aspiraciones, sin que los trazos del pasado nublen la visión del presente.
Cada mañana es una oportunidad para encender esa llama interior, ese aliento vital que nos permite avanzar con determinación.