“Tu perspectiva es la brújula que te guía a través de la neblina.”
En los momentos de incertidumbre, cuando la claridad parece esquiva, es tu perspectiva la que actúa como una brújula infalible. Piensa en la neblina que puede ocultar el camino; tu mentalidad positiva y enfocada es la que disipa esa bruma.
La motivación se renueva cuando eliges ver el potencial en lugar de los problemas. Que el estímulo te impulse a ajustar tu enfoque, encontrando el norte incluso cuando el horizonte está velado.
Adopta una visión que te empodere y te dirija siempre hacia adelante, sin importar cuán densa sea la niebla.