“Transforma el "no puedo" en "voy a intentarlo" con la chispa de tu determinación.”

El "no puedo" es una jaula construida con los barrotes de la duda. Pero tú posees la llave: la voluntad de probar. Cada vez que eliges el "voy a intentarlo", abres esa celda y liberas la energía que te estaba aprisionada.

Imagina a un niño aprendiendo a caminar. El miedo a caer está presente, pero la determinación de dar el primer paso es más fuerte. Ese es el ánimo que debes invocar hoy. No se trata de eliminar el miedo, sino de actuar a pesar de él, con el estímulo de la posibilidad.