“Que tu primer pensamiento al despertar sea una chispa de posibilidad.”

La primera hora de tu día es como el primer trazo en un lienzo. ¿Será un borrón de apatía o una pincelada de inspiración?

Piensa en ello como el instante antes de que el director de orquesta levante la batuta. Hay un silencio expectante, lleno de potencial. Tu primer pensamiento puede ser esa batuta, dictando el ritmo y la melodía de tu jornada. Deja que sea una idea brillante, un objetivo que te apasciona.