“El eco de tus logros pasados debe ser el susurro que te anime a conquistar nuevas cimas.”

Recordar tus victorias, por pequeñas que sean, es una fuente inagotable de energía y un recordatorio de tu capacidad.

Piensa en un escalador que, al mirar hacia atrás, ve el camino recorrido y se llena de la inspiración necesaria para el siguiente tramo de ascenso. Tu historial de éxitos es tu mejor combustible.

Permite que el recuerdo de tus triunfos te funcione como un estímulo, un recordatorio de que ya posees las herramientas y la fuerza para superar cualquier obstáculo que se presente en tu horizonte actual.