“Que tu impulso interior sea la brújula que te guíe a través de las nieblas del ayer y hacia el sol naciente de tus metas.”

A veces, el camino se torna incierto, envuelto en la neblina de las dudas y los miedos. En esos momentos, no busques un mapa externo, sino escucha la voz resonante de tu propio impulso. Él es tu guía más fidedigna.

Este impulso es esa chispa que te empuja a levantarte incluso cuando el cansancio intenta retenerte. Es el susurro que te anima a dar un paso más, aunque parezca insignificante. Confía en esa energía innata que te conecta con tu potencial.

Deja que esa fuerza interior te lleve más allá de las sombras del pasado, hacia el horizonte brillante de tus aspiraciones. Hoy, permite que tu brújula interna marque el rumbo.