“Encuentra el eco de tu fuerza en el silencio de la duda, allí reside tu impulso más puro.”

La duda, a menudo percibida como un obstáculo, puede ser en realidad un catalizador. En ese espacio de quietud mental donde las inseguridades intentan apoderarse, es donde realmente podemos escuchar la voz de nuestra propia resiliencia. El "eco de tu fuerza" es esa confirmación interna, esa convicción que emerge más fuerte cuando se enfrenta a la vacilación.

Este aliento no se encuentra en la ausencia de miedo, sino en la capacidad de actuar a pesar de él. Es un estímulo para recordar tus logros pasados, tus superaciones y la tenacidad que te ha traído hasta aquí. Cuando el murmullo de la duda se intensifica, busca ese eco, esa resonancia de tu propia capacidad, y encontrarás tu impulso más puro.