“Cultiva la semilla de la persistencia en el jardín de tu voluntad.”

El crecimiento, tanto personal como profesional, florece en el terreno fértil de la constancia. El estímulo diario es el riego necesario.

Piensa en un árbol robusto que, a pesar de las tormentas y las estaciones cambiantes, se mantiene firme. Tu voluntad es la tierra, y la persistencia, alimentada por tu motivación, es lo que permite que tus raíces se hundan profundamente y tu tronco se eleve.