“La sinfonía de tus logros comienza con la nota solitaria de tu primera acción.”

Esta metáfora musical subraya la importancia del primer paso. Toda gran obra, toda motivación sostenida, nace de un acto inicial, por pequeño que sea.

Imagina una orquesta esperando la indicación del director. Esa primera nota, tocada con energía, es la que desencadena la melodía completa. Tu acción inicial es esa nota; es el impulso que pone en marcha la hermosa sinfonía de tu progreso diario.