“Deja que tu resiliencia sea la marea alta que eleva tu espíritu por encima de las arenas movedizas del desánimo.”

La frase utiliza la poderosa imagen de la marea para representar la fuerza interna que nos permite superar las dificultades. La motivación diaria se basa en cultivar esta fortaleza.

Piensa en las arenas movedizas como esos momentos en los que nos sentimos atrapados, sin avance. El desánimo puede ser un agujero negro que nos absorbe. Pero tu resiliencia, esa capacidad de recuperarte, es una fuerza natural y poderosa.

Como la marea que sube imparable, tu energía para levantarte, para seguir adelante a pesar de los obstáculos, puede elevarte por encima de las dificultades. Cada mañana, concéntrate en fortalecer esa marea interior, en sentir cómo te impulsa y te permite avanzar.