“La fuerza no se encuentra en la ausencia de miedo, sino en la valentía de avanzar a pesar de él.”

Todos experimentamos miedos, pero son nuestras acciones frente a ellos lo que define nuestro carácter.

La verdadera energía surge cuando elegimos dar un paso adelante, aunque nuestros corazones latan con aprensión. Es un acto de coraje, un testimonio de nuestra fortaleza interior. Imagina a un alpinista que, con las manos temblorosas, se aferra a la roca para alcanzar la cima; su progreso se mide por la voluntad de seguir ascendiendo.