“La <em>satisfacción</em> es el dulce aroma que emana de un propósito bien vivido.”

Esta frase vincula la felicidad con la experiencia de tener un propósito y vivir una vida con significado, generando una sensación de logro y plenitud.

Piensa en el perfume embriagador de un jardín cuidado con esmero. Tener un objetivo que te motive y alinear tus acciones con él, crea una fragancia duradera de bienestar y gozo en tu existencia.