“El gozo reside no en tener todo, sino en apreciar cada instante con plenitud.”

Esta frase nos invita a repensar nuestra concepción de la felicidad. A menudo, la buscamos en posesiones materiales o logros futuros, creyendo que la satisfacción reside en alcanzar un estado idealizado.

Sin embargo, la verdadera alegría se encuentra en la capacidad de valorar el presente, incluso en las cosas más pequeñas. El bienestar no depende de la abundancia, sino de la gratitud por lo que ya tenemos.

Concentrarnos en el "tener" nos impide experimentar la dicha que se esconde en cada momento. La plenitud se construye apreciando los pequeños placeres, las conexiones significativas y la belleza que nos rodea. Transforma tu perspectiva y encontrarás el gozo donde menos lo esperas.