“El fracaso es solo el prólogo de una historia de éxito aún por escribir.”

Imagina a un escritor que, tras borradores fallidos, da forma a su obra maestra.

Los reveses no son puntos finales, sino meras introducciones a un capítulo posterior de realización. Cada "fracaso" es una oportunidad para aprender, refinar la estrategia y fortalecer la determinación. La victoria real reside en la capacidad de reescribir la narrativa, transformando los errores en peldaños hacia un futuro de logro.