“La arquitectura del éxito se erige sobre los cimientos sólidos de la preparación y la resiliencia.”

Piensa en la construcción de una gran catedral. Requiere planos detallados, materiales de primera calidad y un equipo dedicado que soporte las inclemencias del tiempo. De igual forma, el éxito se construye planificando meticulosamente cada etapa, asegurando una base de conocimientos y habilidades, y fortaleciendo la capacidad de recuperarse ante los inevitables contratiempos y reconstruir con mayor firmeza.