“El amor, más que un sentimiento, es una elección diaria, un compromiso con la luz del otro. ”

Ladevoción constante y elafecto persistente son decisiones conscientes. Lapasión se renueva con el propósito.

Cada mañana, al despertar, elegimos amar. Elegimos ver lo mejor en la otra persona, nutrir elapego, perdonar las fallas y celebrar las virtudes. Estecariño activo es la esencia delenamoramiento duradero, un pacto deapoyo mutuo.