“La pasión es el torrente que desborda los cauces de la resignación, irrigando la vida con fuerza.”

La pasión no solo se manifiesta en el ámbito romántico, sino como un motor que impulsa a vivir con intensidad y propósito. Es la energía que nos saca de la apatía.

Imagina un río que, al crecer, rompe sus márgenes y riega campos áridos, dándoles vida. La pasión hace lo mismo con nuestra existencia, llevándonos a perseguir nuestros sueños con un fervor que transforma nuestra realidad.