“El amor es la valentía de desnudarse el alma ante el otro.”

La verdadera intimidad en el amor reside en la disposición a ser vulnerable, a mostrar las cicatrices, los miedos y las imperfecciones. Es un acto de arrojo, un paso adelante hacia la conexión más profunda posible, donde la aceptación mutua es fundamental.

Es la decisión de quitarse las armaduras, de mostrar el ser auténtico. Piensa en cómo una obra de arte se aprecia en su totalidad, con sus texturas y matices, no solo en su forma perfecta. Así, el amor florece cuando abrazamos la complejidad.