“La pasión es el motor que impulsa la aventura del amar.”
El amor no es estático; se renueva con la energía vital de la pasión. Es el impulso que nos anima a explorar, a arriesgar, a vivir intensamente cada momento junto a la persona amada, manteniendo viva la llama del deseo y la conexión. La chispa que enciende el fuego interno.