“El afecto es el hilo conductor que une los fragmentos dispersos de un día en un tapiz de conexión.”

El afecto tiene la capacidad de dar cohesión a los instantes. Piensa en las pequeñas piezas sueltas de un día: una llamada, un mensaje, una mirada. El afecto es el hilo invisible que las une, tejiendo un tapiz de conexión humana.

Este tapiz no solo es bello, sino que también proporciona calor y significado a nuestra jornada. Nos recuerda que, incluso en la rutina, hay un hilo que nos une a otros, fortaleciendo el tejido de nuestras relaciones y dándonos un sentido de pertenencia.