“Nuestros afectos son constelaciones privadas, brillando solo para nosotros.”

El amor nos crea un universo particular. Los lazos que forjamos con aquellos a quienes queremos se convierten en un firmamento único, un conjunto de estrellas que solo aquellos que forman parte de ese vínculo pueden comprender en su totalidad.

Piensa en un cielo nocturno lleno de nombres de estrellas que solo tú conoces, cada una representando un momento, una risa compartida, un apoyo incondicional. Ese cariño es una cartografía emocional que nos guía.

Es una pasión que ilumina los rincones más íntimos de nuestra existencia, creando memorias que son nuestra propia mitología.