“Amar es tejer un manto invisible de protección, un susurro de confianza en el alma del otro.”

Esta imagen poética describe el amor como un acto de cuidado y seguridad. No se trata de posesión, sino de un acto de crear un espacio de resguardo emocional.

El manto invisible representa la protección que ofrecemos, un escudo contra las adversidades del mundo exterior. El susurro de confianza es la reafirmación constante de que el otro puede ser vulnerable y ser amado incondicionalmente.

Es una conexión que se siente, un bálsamo que calma las inquietudes, donde el cariño se expresa en la seguridad que brindamos y la fe que depositamos en la persona amada.